Fue en el verano de 1962 cuando Torres dio vida al primer Viña Sol.
Después de años experimentando, dimos con la combinación perfecta: una frescura única, un sabor afrutado y un origen 100% mediterráneo. Y nos gustó tanto, que decidimos compartirlo contigo y con el mundo.

Durante sus primeros años de vida, Viña Sol fue creciendo en una época de cambios y contrastes. En esta, decidimos que, aunque el mundo cambiase, nosotros seríamos fieles a nuestro carácter para siempre. Así pues, para asegurarnos de ello, en 1988 elegimos un símbolo, el sol mediterráneo, que representara nuestro carácter único.

La globalización tuvo un impacto enorme en nuestras vidas. De repente, todos podíamos estar en todas partes gracias a los increíbles avances en las comunicaciones.
Viña Sol no quiso desaprovechar la oportunidad y consiguió, en 2003, llegar a comercializarse en más de 80 países. Nuestro objetivo era transmitir nuestro carácter mediterráneo y nuestra frescura única alrededor del mundo.

Este año fue muy especial porque celebramos que Viña Sol llevaba medio siglo siendo uno más en los mejores momentos de muchas personas. Y para celebrarlo, decidimos vestir el cuello de nuestras botellas con un nuevo diseño conmemorativo que incluía cincuenta soles.

Por primera vez, Viña Sol fue seleccionado como uno de los mejores vinos del mundo por la revista Decanter, referente a nivel internacional. El jurado otorgó a nuestro Original de 2019 una puntuación de 91 sobre 100 y lo describió de la mejor forma posible, como “un vino brillante, fresco y muy apetecible”.

Este año decidimos cambiar el diseño de nuestras botellas.
El mundo tiene claro que desprendemos luz y frescura, pero somos de los que pensamos que los cambios siempre son buenos. La nueva etiqueta ha querido dar aún más protagonismo a nuestro símbolo más importante: el Sol. Y, así, brillar aún más, ¡si cabe!